Motivos para cambiar código existente

Cuando se dispone de un código existente, es muy habitual tratar de alargar su vida útil el mayor tiempo posible. Esto es importante porque los costes derivados de un desarrollo pueden ser más que notables y, por tanto, optimizar software es una inversión que las empresas tienen que amortizar, en muchos casos cuanto antes.

Sin embargo, hay situaciones en las que es buena idea modificar un código existente. Bien total o parcialmente, aunque eso suponga llevar a cabo una inversión que excede la que se realiza para llevar a cabo su mantenimiento. A continuación te indicamos algunas situaciones que pueden hacer necesario llevar a cabo modificaciones sustanciales o incluso reemplazar totalmente una base de software. Una tarea que intentamos evitar, pero que, en ocasiones, es prácticamente inevitable. Descubre por qué.

Seguridad del código existente

El primer motivo que puede llevar a cambiar un código existente es su nivel de seguridad. Sin duda, cuando existe un software inseguro debe atajarse el problema de manera inmediata, por lo que es importante llevar a cabo análisis periódicos de seguridad para detectar posibles vulnerabilidades el el código. Y si se detectan, cambiarlo por otro que ofrezca más confianza.

Si la seguridad es el motivo que se esgrime para hacer cambios en el código, es posible que estos solo afecten a parte del código existente. Pueden afectar solo a módulos concretos, como el de autenticación de usuarios, o bien ser necesario hacer cambios que afecten a todo el código. Como la corrección de vulnerabilidades que afectan al código de forma transversal.

En algunos casos, puede que sea necesario tener que aplazar, eso sí, las modificaciones. Sobre todo cuando son muy costosas y hay que repartir sus gastos. En este caso, basta con aislar los componentes problemáticos del resto del sistema y dejar su sustitución para más adelante, cuando se vaya a actualizar toda la base de software. Se trata de una solución que no es muy eficaz, por lo que conviene hacer los cambios cuanto antes.

Obsolescencia del código existente

Por supuesto, otro de los grandes motivos que pueden hacer que el código existente necesite cambios o, directamente, ser sustituido, es su obsolescencia. En muchos casos, las tecnologías actuales no son compatibles con la base de código de que dispone la empresa y adaptar dicha base de código a nuevas necesidades puede resultar complicado.

En este caso, igual que el de la seguridad, es posible que estos cambios deban llevarse a cabo de forma urgente. Por ese motivo, llevar un control de los componentes que utilizamos y de cuando llega el fin de su ciclo de vida puede ayudar a prever cuándo es el momento adecuado para dar el salto. De hecho, en muchos casos, la obsolescencia del software es el primer síntoma de futuros problemas de seguridad. Un componente de software que deja de recibir mantenimiento es, con toda probabilidad, una futura fuente de vulnerabilidades.

Los elevados costes de mantenimiento del código existente

Todo software requiere de un mantenimiento. Incluso los paquetes comerciales necesitan que un administrador, o bien el propio usuario, instale actualizaciones, parches, etc. Si se trata de un software desarrollado a medida, hará falta adaptarlo con mayor motivo para que siga respondiendo a las necesidades de la empresa.

Sin embargo, llega un momento en que los costes de mantenimiento del código existente pueden dejar de estar justificados y compense reemplazarlo por otra aplicación más actual. En general, esta causa de cambios suele estar relacionada con la anterior: el software presenta tantas muestras de obsolescencia que modificaciones que serían sencillas en otras circunstancias no pueden hacerse o resultan muy costosas.

Habitualmente, la situación descrita conlleva que, a medida que aumenta el presupuesto destinado a mantener la aplicación, esta sea cada vez menos operativa. Esto es debe a que es necesario llevar a cabo solo las modificaciones ineludibles para que el gasto no se dispare.

Integración con un nuevo sistema

La mayoría de las tecnologías están diseñadas para ser integradas entre sí. Por eso es posible que un código existente deba modificarse, o incluso sustituirse, si cambias alguna pieza fundamental del software usado en tu empresa.

Por ejemplo, si decides incorporar una nueva herramienta de facturación y dispones de una aplicación de ventas que está programada para trabajar con la citada herramienta, será necesario modificar el software existente para que siga funcionando. En otros casos, el desarrollo de software funciona sobre una plataforma como un ERP que, si se sustituye, obligará a desarrollar una nueva aplicación o a cambiar la práctica totalidad de la utilizada.

Estos cambios no son muy frecuentes, pero cuando se llevan a cabo suponen una verdadera revolución que arrastra a gran parte de la tecnología de la empresa. Sin embargo, incluso en cambios más sencillos, como la sustitución de un sistema documental tradicional por uno de firma electrónica, es preciso adaptar el software existente.

Un despliegue en la nube puede obligar a desechar una parte

Por último, una de las grandes tendencias de los últimos años es llevar el software de la empresa a la nube. Mantener servidores propios es una tarea que requiere de muchas horas de trabajo especializado y de una infraestructura compleja de red. Con todo lo que conlleva: sistemas de refrigeración, backups o sistemas de alimentación ininterrumpida, entre otras cosas

Por ese motivo, suele resultar conveniente, en términos económicos, migrar el software de la empresa a servidores en la nube. El problema es que este no siempre está pensado para utilizarlo de esta forma. Además, si dispones de servidores algo antiguos, puede que no sea posible encontrar su equivalente online.

En estos casos, es posible que lo que deje de funcionar no sea el propio código existente. Lo harán otros componentes del sistema, como las bases de datos o los sistemas de almacenamiento. Por suerte, casi con toda probabilidad dispondrás de alternativas excelentes a un coste que, probablemente, sea más asequible. No obstante, el código existente deberá modificarse para funcionar con ellas.

En no pocos casos, la migración a la nube es un buen momento para rehacer aplicaciones, repensar la forma de utilizar la tecnología y, en pocas palabras, dar un buen empujón a la base tecnológica de tu empresa. Como verás, los motivos para cambiar código existente no son pocos y es conveniente tenerlo previsto en los presupuestos de los departamentos de TI. De ese modo, tanto si el cambio se lleva a cabo por necesidad, como si se hace para aprovechar la oportunidad de modernizar el funcionamiento de la compañía, la inversión necesaria estará ya prevista, al menos en parte. Al hacerlo así, los cambios imprevistos pasarán menos factura, así que ¡planifica con antelación cualquier cambio de código existente!